Siempre me preguntaré si, de no haberte seguido hasta ese callejón aquella noche, si de haber esperado un día más...
Siempre me preguntaré qué hubiera pasado si me hubieras roto el corazón sólo un día más tarde, cuando ya no fuera posible subir a ese coche, ir a ese viaje...
Siempre me preguntaré cómo habrian sido las cosas si yo no hubiera sentido nunca esa mugre imposible de limpiar, esa asfixia, esas ganas de gritar hasta sentir que me desgarro...
Sin embargo,hoy hace más de una década de aquello.
Y me he dado cuenta de que llevo demasiado tiempo arrastrándolo y dejando que pueda conmigo.
Demasiado tiempo dejando que forme parte de mi presente.
Demasiado tiempo permitiendo que ensucie momentos bonitos.
Así que he decidido poner otro candado a esa puerta. Uno grande, del material más resistente, y con la llave más pequeña del mundo, para perderla y no encontrarla jamás.
Sé que esa mancha nunca se borrará, pero también sé que tengo el poder de hacerla menos visible.
Y pienso seguir luchando por conseguirlo.
Al igual que pienso seguir buscando esa niña que llevo dentro, esa niña inocente que secuestraste y torturaste hasta que dejó de ser niña.
Porque sé que sigue viva, en algun lugar entre los escombros de mi infancia.
Porque ni siquiera el infierno ha podido con ella.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario